
PSICOLOGÍA
JUDICIAL

PSICOLOGÍA JUDICIAL

La Psicología Judicial es la rama de la psicología que relaciona esta ciencia y el derecho. Se puede hablar también de psicología jurídica y de psicología forense. La meta es favorecer las conclusiones legales en las que hay implicadas cuestiones psicológicas o psiquiátricas. Por medio de evaluaciones exhaustivas se elaboran informes judiciales.
Existen diferencias entre la psicología jurídica y la psicología clínica. Son estas diferencias y particularidades las que hacen que la psicología jurídica sea exclusivamente requerida por jueces y letrados y en general por todos aquellos actores de un juicio o procedimiento en el que se necesite el apoyo científico de un profesional psicológico aplicado al derecho en concreto. Vamos a ver las diferencias que existen, pues, entre un psicólogo jurídico o psicólogo forense y un psicólogo clínico, además de que el segundo no suele trabajar dentro del ámbito del derecho.
Diferencias entre psicólogo jurídico y psicólogo clínico
Como hemos dicho antes, el psicólogo jurídico se encarga de hacer informes judiciales. Antes de redactar un informe, habrá tenido que hacer lo que se conoce como evaluación psicológica forense, que es diferente de la realizada con fines clínicos. Estos informes, los informes periciales psicológicos, requieren un nivel de especialización muy alto y tienen una finalidad específica. Especialización que aporta el psicólogo jurídico. Si, por ejemplo, una persona acude a terapia porque sufre estrés postraumático, el psicólogo clínico actuará con la finalidad de ayudar a esa persona a recuperarse del trauma y superar el estrés postraumático. Sin embargo, la figura del psicólogo jurídico o psicólogo forense tiene como función evaluar el grado en el que se manifiesta el trauma y evalúa asimismo los daños psicológicos que se hayan podido ocasionar. Asimismo, descarta que se produzca simulación o disimulación y contribuye a que se tomen las decisiones más correctas y más ajustadas a los hechos que sea posible, dentro del marco legal. Todo esto lo expresa a través de los informes periciales psicológicos. Son pocos los psicólogos que tienen experiencia en una evaluación psicológica forense.
Lo principal en los informes periciales psicológicos es que sean comprensibles. Las conclusiones y recomendaciones que aporta el psicólogo jurídico deben ser claras. La principal razón es que estos informes deben ayudar a la toma de decisiones sin añadir confusión al proceso. Además de esto, a un psicólogo jurídico o psicólogo forense se le exige que tenga un amplio historial clínico, altas capacidades de evaluación y de comunicación de lo evaluado, así como experiencia en evaluaciones psicológicas inscritas en un marco legal. Por último, cabe señalar que un psicólogo jurídico no emite juicios ni opiniones fuera de su ámbito profesional. Esto debe quedar claro, puesto que lo que se espera de él es que actúe como especialista dentro de sus límites competenciales y que identifique correctamente cuáles son sus límites dentro de su trabajo.
La Psicología aplicada al Derecho de Familia
Los psicólogos deben asesorar al Juez en los procesos de Separación y Divorcio en las medidas a adoptar respecto a los hijos y en otras situaciones tales como nulidad, matrimonio de menores; también en los casos sobre acogimientos y adopciones.
El psicólogo del Juzgado de Familia no sólo debe evaluar cómo afecta a los hijos la separación, sino que también puede diseñar programas que apunten a positivizar situaciones difíciles que los menores se van a encontrar.

El psicólogo, desde el ámbito privado puede actuar como asesor del juez (actuando como perito), del abogado que reclama sus servicios y como colaborador del abogado en la resolución del procedimiento familiar en todos los momentos del mismo y con un enfoque interdisciplinar
Sus funciones en los Juzgados de Familia son:
• Emitir los informes técnicos de la especialidad solicitados por el Juzgado en los procesos de rupturas de parejas con hijos (separación, divorcio, nulidad e incidentes de modificación).
• Emitir los informes de la especialidad en otras situaciones que plantea el derecho de familia: tutelas, acogimiento, adopciones, autorizaciones para contraer matrimonio, etc.
• Seguimiento de los casos.
• Asesoramiento a los jueces y fiscales.
En otras Instituciones:
• Mediación familiar.
• Peritajes privados.
• Peritajes y asesoramiento con Tribunales Eclesiásticos.
En el ámbito Privado:
• Perito.
• Asesor del Abogado.
• Colaborador con el Abogado (trabajo interdisciplinar en todo el procedimiento).
• Mediador.
La Psicología Jurídica y el Menor
Mediante estudios, el psicólogo debe informar sobre la situación del menor y cuáles son las posibilidades de su reeducación y tratamiento. De esta forma el psicólogo ayuda a que la Justicia module la aplicación legal a criterios científicos.

La entidad pública (Comunidades Autónomas) será la encargada de aplicar las medidas educativas impuestas por el Juez, donde el psicólogo realiza una gama de intervenciones como son el diseño y seguimiento del tratamiento.
Sus funciones en los Juzgados de Menores son:
• Emitir los informes técnicos de la especialidad, solicitados por el Juez o el Fiscal.
• Asesorar las medidas que deben ser aplicadas.
• Seguimiento de las intervenciones.
En otras Instituciones:
• Planificar el funcionamiento del Centro.
• Aplicación de tratamientos individuales y colectivos.
• Elaboración y aplicación de programas en medio abierto.
• Técnicas de Mediación.
En estos Juzgados el Rol profesional está regulado por Ley, en el resto de las Instituciones dependiendo de su organización (institucionales, semiinstitucional o privadas) puede sufrir alteraciones.